Tratamiento psicológico para la fobia a la sangre y/o inyecciones

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En Origen te ofrecemos el tratamiento para la fobia a la sangre y/o inyecciones más reconocido y avalado por los Organismos Internacionales.

¿Qué es la fobia a la sangre y/o inyecciones?

También conocido como Hematofobia, es un trastorno de ansiedad caracterizado por el miedo intenso e irracional ante la sangre – tanto propia como ajena – y todo lo relacionado: inyecciones, hospitales, heridas.

MUJER FELIZ SENTADA MIRANDO Y PENSANDO

¿Eres la persona indicada para este tratamiento?

Este tratamiento te puede beneficiar si,  al estar en presencia de sangre, sientes  mareos, sudores y palidez, pudiendo llegar al desmayo. Y esto ha generado un miedo hacia todo lo asociado con la sangre y las sensaciones que te provoca.

SÍNTOMAS

  • Te has desmayado ante estos estímulos
  • Presentas mareos y náuseas ante estas situaciones
  • Ante estas situaciones notas unas disminución del ritmo cardíaco y de la presión sanguínea
  • Te genera elevado malestar y ansiedad el pensar que tienes que ir a realizarte una analítica, estar con inyecciones o ver sangre
  • Evitas el campo de la salud: pruebas médicas, hospitales
  • Este miedo puede provocar que cuides tu salud física

Resultados del tratamiento para la fobia a la sangre y/o inyecciones

  • Podrás estar sin desmayarte ante estos estímulos
  • Cuidarás de manera adecuada tu salud física
  • Reducirás la ansiedad que te generan estas situaciones

Tipo de tratamiento para la fobia a la sangre

Tratamiento psicológico para la fobia a la sangre. Tensión muscular aplicada para fobia a la sangre y/o inyecciones

Tipo de tratamiento Psicológico
En qué consiste Es un tratamiento psicológico en el que entrenarás y pondrás en marcha las estrategias y herramientas necesarias para afrontar las situaciones asociadas a la sangre y no desmayarte.

Este tratamiento está basado en la orientación cognitivo-conductual, por lo que el tratamiento contempla la intervención en tres áreas: los pensamientos, las emociones y el comportamiento.

Mediante la modificación de ciertos aspectos en cada una de las tres áreas, observarás una mejora progresiva en tu bienestar ante la presencia de sangre o estímulos asociados a la misma.